Una cuenta individual de jubilación (IRA, por sus siglas en inglés) te permite ahorrar e invertir dinero para tu retiro con ventajas fiscales.
Un Roth IRA ofrece el potencial de crecimiento libre de impuestos sobre las contribuciones después de impuestos.
Para un IRA tradicional, tus inversiones tienen la oportunidad de crecer de forma diferida en cuanto a impuestos con contribuciones antes de impuestos y después de impuestos.
Las inversiones tienen el potencial de crecer libre de impuestos o de forma diferida en cuanto a impuestos.
Para un IRA tradicional, generalmente pagas impuestos más adelante. Realizarás contribuciones deducibles de impuestos y las inversiones tienen la oportunidad de crecer de forma diferida en cuanto a impuestos.
Si necesitas el dinero antes de cumplir los 59 años y medio, pagarás una penalidad del 10% además de los impuestos sobre los ingresos esperados que debías. Cualquier retiro que realices después de cumplir los 59 años y medio se considera como un ingreso ordinario. Las distribuciones mínimas requeridas comienzan a los 73 años.
Para un Roth IRA, pagas impuestos antes de aportar el dinero. Las contribuciones son hechas después de impuestos y cualquier ganancia potencial puede crecer libre de impuestos. Ten en cuenta que las contribuciones al Roth IRA pueden estar limitadas según tu estado civil y tus ingresos.
Para obtener más detalles consulta la página web del Hacienda o consulta con un asesor fiscal sobre tu situación.